EL TEJÓN – Meles
meles
Hoy nos toca hablar de un simpático animal, el tejón, que
pasa desapercibido por nuestros montes debido a sus hábitos nocturnos, aunque
está presente en prácticamente toda la península ibérica.
-Descripción:
El tejón (Meles meles)
es una de los mustélidos de mayor tamaño, reconocible por su cabeza triangular;
cuello, cola y patas cortas; hocico bastante prolongado (lo emplea para
excavar); y ojos y orejas de tamaño pequeño, estas últimas orientadas hacia los
lados y hacia atrás.
Sus patas son muy fuertes y robustas, y posee cinco dedos
en cada una de las patas, una planta con almohadillas y fuertes uñas,
convirtiendo a este animal en una auténtica máquina de excavar. Su hocico, como
se dijo anteriormente, también es usado para excavar, y en ocasiones para
hozar.
La piel del tejón es muy gruesa y resistente, cubierta de
un denso pelaje bastante peculiar, ya que su coloración es blanca en las puntas
y en la raíz y negra en el medio, lo que da una cierta impresión de gris,
exceptuando las zonas blancas (la cabeza, aunque con dos franjas negras que
abarcan los ojos, y los bordes de las orejas y el extremo de la cola) y negras
(el vientre y las patas).
Este animal tiene los sentidos del olfato y el oído muy
desarrollados, mientras que la vista está más limitada, ya que su actividad es
nocturna y en la oscuridad de la madriguera principalmente.
-Origen:
El origen de esta especie es bastante relevante, puesto
que habita nuestro planeta desde hace 4 millones de años según los
paleontólogos, y su dentición ha sido la que más ha evolucionado.
-Hábitat:
El hábitat varía desde zonas semiáridas hasta zonas de
alta montaña, prefiriendo bosques claros de frondosas combinados con pastizales
amplios, debido al tipo de alimentación que sigue. La presencia de ganado y la
existencia de terrenos aptos para excavar favorecen a los tejones.
-Alimentación:
Los tejones son omnívoros, comiendo prácticamente de
todo, sin desdeñar la carroña, como vemos en el vídeo
del final del post y en la imagen del principio (en ambos está comiendo parte de un ave muerta). No obstante, es
conocido por alimentarse de abejas y miel, de donde proviene su nombre latino
de “Meles” (miel en latín).
-Comportamiento:
El tejón es un animal principalmente nocturno, y es capaz
de emitir hasta 13 sonidos diferentes dependiendo de la situación en la que se
encuentre,; capaz de trepar, nadar y correr rápido pese a que su cuerpo no
está adaptado a ello.
Aunque suele cazar por las noches, es un animal bastante
social, viviendo en colonias de 2 a 12 animales en madrigueras subterráneas
conocidas como tejoneras o cados, que después de ser
estudiadas por investigadores distinguen varias partes: cámara principal; conductos principales,
de escape y ventilacion; la letrina o retrete; y la litera o cuna.
En cada
tejonera suele haber un macho y una femia dominantes, que generalmente son los
únicos que se reproducen con éxito
Al igual que otros animales, marcan en territorio con sus
excrementos, depositados en oquedades excavadas por ellos mismo (letrinas). Se
estima que sus territorios pueden oscilar entre las 50 – 150 ha. Al ser tan
territoriales, se muestran muy agresivos con los miembros ajenos a su colonia.
Los tejones hibernan, es decir, se refugian en una guarida
permaneciendo dormidos durante la época de invierno, hasta que llegan mejores
condiciones climáticas; no obstante, se despiertan de vez en cuando, aunque no
tardan en volver a dormirse.
-Reproducción:
La base de la colonia está constituída por el macho y la
hembra dominantes, formando parejas duraderas que son, normalmente, las únicas
de la colonia que traen descendencia.
Suelen tener una camada anual, siendo la época de celo en
marzo y agosto; las gestación dura 65 días, dando a luz de 2 a 6 crías que
nacen en un nido subterráneo, ciegas y prácticamente desnudas, a temperaturas
de 18-20 ºC.
La lactancia dura unos 3 meses, y las crías se
independizan a los 6 meses.
Una capacidad que tienen las hembras es la implantación
retardada (pueden guardar el óvulo fecundado varios meses), y el cigoto puede
detener su desarrollo hasta 10 meses, esperando a que las condiciones
ambientales sean las apropiadas para la implantación en el útero.
-Principales enemigos:
Como no podía ser de otra manera, el principal
enemigo de los tejones es el ser humano, causando la reducción de sus
poblaciones por medio de atropellos, lazos (como podeis ver en la noticia que os dejo al final de este post)
y furtivismo. Los grandes carnívoros (oso, lobo, lince, zorro, gato montés y
gineta), y las rapaces nocturnas y diurnas pueden predar sobre los ejemplares
jóvenes de esta especie.
Los pasos específicos para la fauna en infraestructuras
viales y la reducción del furtivismo son dos actuaciones que ayudarían a
reducir las altas tasas de mortalidad de tejones y favorecer el buen estado de
conservación de sus poblaciones.
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