¿Qué pasa con el glifosato?

El glifosato es uno de los elementos más empleados en todo el mundo como agente activo de herbicidas. Desde hace unos años, investigaciones han puesto en entredicho la seguridad de este elemento de cara a la salud humana, ¿quieres saber cómo está la situación ahora?

¿Qué es el glifosato y para que vale?

Roundup®, herbicida con glifosato como agente activo. Fuente: internet

El glifosato es un elemento básico para la formación de herbicidas. Monsanto, empresa dedicada a la comercialización de agroquímicos y productos destinados a la agricultura (recientemente comprada por la empresa Bayer), desarrolló en 1974 un herbicida conocido como Roundup®. Este herbicida tiene 3 componentes principales: glifosato (ingrediente activo), solvente (agua o ingredientes inertes) y una mezcla de surfactante similar a la empleada para el jabón. El principal propósito es la eliminación de malezas indeseadas.

Según Monsanto, su primer fabricante, el glifosato es un herbicida no selectivo, lo que significa que tiene efectos sobre la mayor parte de las especies de plantas verdes.

Roundup® se pulveriza sobre las hojas o tallos verdes de plantas, y el glifosato que contiene es absorbido por la planta y circula a través de sus tejidos. Este compuesto inhibe la formación de ciertos aminoácidos necesarios para la planta; a consecuencia, esta se marchita, sus raíces comienzan a descomponerse y finalmente muere.

¿Cómo llega el glifosato al ser humano?

Los principales medios por los que llega al ser humano son la exposición directa a aquellos que lo manipulan o lo aplican (agricultores principalmente), por su presencia en ciertos alimentos y por filtraciones al agua en las zonas en las que se emplea.

¿Qué problema hay con el glifosato?

El problema principal de este producto es que no se conocen exactamente sus efectos sobre la salud humana. La IARC (Agencia Internacional de Investigadores del Cáncer) ha catalogado al glifosato en el grupo 2A (producto probablemente cancerígeno para el ser humano), tras revisar más de 1.000 publicaciones acerca de este elemento y encontrar evidencias de que causa daños cromosómicos en las células de la sangre (daños genotóxicos) y de que produce estrés oxidativo, tanto para el caso de animales como para estudios en seres humanos in vitro. No obstante, en el grupo 2A se engloban agentes como la carne roja, bebidas calientes o trabajar de peluquero, estando el herbicida al mismo nivel que estos agentes.

La IARC es un grupo de estudio englobado dentro de la OMS (Organización Mundial de la Salud), y es el único grupo de entre los 4 que la conforman que ha incluido al glifosato en el grupo 2A.

En el medio ambiente, se considera que es un producto que provoca daños por contaminación en suelos y aguas, y afecta a diversos seres vivos, donde podríamos destacar a los polinizadores o a los animales acuáticos, que son especialmente sensibles a este producto según la IARC. Además, obviamente, produce daños sobre la vegetación, puesto que su empleo es para la erradicación de la vegetación indeseada, aunque a veces no se haga del mejor modo posible…

¿Está prohibido su uso en la Unión Europea?

De momento, el glifosato puede seguir siendo empleado en la Unión Europea (a menos que la legislación del país en el que se emplee lo prohíba expresamente), con ciertas limitaciones y a esperas de un nuevo informe en 2022 que marque el futuro de este producto en la Unión Europea.

Opinión

Mientras que algunos países como Francia se postulan en contra del glifosato, queriendo reducir su empleo hasta eliminarlo a nivel estatal en 2021, otros países como España no han tomado ningún tipo de medida (a mayores de las limitaciones europeas) contra el uso de este producto, si bien es cierto que de manera local su uso se ha limitado o prohibido en ciertos lugares del país. En mi opinión se debería ser cautos con su empleo, tanto a nivel estatal con normativa para su uso como a nivel particular en el modo de empleo.

No obstante, en este tema como en cualquier otro, cada persona debe ser responsable de sus actos, y emplee o no productos que puedan ser dañinos debe ser consciente de las repercusiones que puede tener para sí mismo y para el medio que le rodea. La responsabilidad, muchas veces condicionada por la desinformación y en ocasiones ausente, es bajo mi punto de vista el factor más importante y al que poco protagonismo se le otorga, bien por falta de acceso a la información (hoy en día cuestionable) o por falta de ganas de informarse.